sin límites

El nuevo regimen de neoesclavitud que nos depara la tan mentada globalización, está a punto de cumplirse. Trabajo descualificado económicamente pero para el que se exige sobrecualificación, trabajo inestable y mal pagado, teoría del palo y la zanahoria (”muy bien, chaval, llegarás lejos, pero cuidado con Jiménez que viene con ganas, y tengo 200 detrás que matarían por hacerlo gratis”), obscena competencia entre trabajadores por incumplir su horario laboral “al alza” (80 horas semanales de las que se pagan 40, así que si te limitas a cumplir tu horario “te miran mal” porque “no te sacrificas por la Empresa”.
Todos absolutamente los neoliberales y friedmanianos, -neo-con's- pidiendo una inyección de capital, y queriendo volver a los mismo. ! Que ya tiene gracia que el capitalismo se lo hayan cargado los especuladores y locos por el mercado!, y además quieran volver a las andadas, pidiéndonos que les volvamos a poner la pasta!En cuanto a la educación, tras variadas experimentaciones, somos muchos más idiotas que antaño. Un 30% de fracaso escolar, y subiendo. Los que valen se van y los que no tienen ganas se colocan en el salón de mamá.No es cuestión de echarle las culpas al profesorado; bastante tienen con aguantar la LOGSE, o la LOCE, o la LOCA, o como se llame ahora.Concursantes de la vida, se apunta a GH, a escándalos dentro y fuera de programas televisivos, super-bien peinados y lacados, diciendo bobadas sin parar y consiguiendo gran audiencia.
Es el chapapote ideológico, que llega de la mano de nuestros ilustres políticos. Insulto, descalificación y muchas vacaciones. Un mes y medio en Navidad y han vuelto ha coger unos días de asueto para esquiar.
Dicho lo cual, parece que podemos redefinir nuestro envidiable futuro laboral a veinte años vista, la desaparición casi total de la clase media y su sustitución por una minoría de millonarios y un enorme colectivo de desheredados que serán la envidia de todo admirador del marxismo - leninismo; ya no sólo volvemos al siglo XIX laboral, sino también educativo. Una masa de harapientos analfabetos. Eso sí, no se preocupen, el déficit lo pagarán los nuevos analfabetos globalizados sin rechistar, eso sí está garantizado.Y para que vean lo fácil que es conseguir audiencia en ARCO, Merino no ha tenido sino que criticar a Damien Hirst, hacer una parodia y caer en lo que critica; for love money. Ha conseguido salir en medios internacionales, y vender la obra. Igualito que Operación Triunfo; versionar canciones. Todo un arte.
Última hora y cosa esperada: Los medios piden al gobierno que les salve. No es que estén en crisis por internet, es que ya no los cree nadie. Mi adicción a la prensa escrita era y no es. Harta de la independencia de las prensa, de su globalidad, y de sus anuncios de prostitución. Con una mano escriben y con la otra....

( fotografía de la obra de Eugenio Merino)