lunes, 3 de agosto de 2009

asuntos propios

Si de verdad quiere saber cómo funciona un país, no lea prensa, no escuche radio, no oiga las explicaciones -cada día más obvias de los políticos- simplemente, pásese por alguna de las oficinas de la administración a resolver algo.
Por ejemplo, si quiere renovar el pasaporte con rapidez, no dude en visitar la página web- del Ministerio del Interior, que está tan interiorizada que no pasa los registros de seguridad. Vaya a direcciones de comisarias; el Ministerio tiene muchas comisarias- con teléfonos incluso- que no contestan.
Acérquese a una de ellas, le dirán que sólo con cita previa, llame a la cita previa, después de un desgaste intelectual y físico de "marque el 1, marque el 2, si quiere decir no marque el 3, si quiere decir sí marque el 1, y así hasta el infinito", no conseguirá absolutamente hablar con nadie, le darán cita para un mes después de el viaje para el que necesita pasaporte.
Vaya a continuación a varias comisarias, sitas en lugares diversos, y nunca en el número y la calle que consta, sino a la vuelta de dónde dice que está- la pura verdad-( esto del sitio, tengo que hablarlo con mi psiquiatra, nadie me cree). Llego: "no hay nada que hacer, dice la funcionaria". "Vd, lo que pasa es que es muy descuidada: me espeta".Yo le digo a mi vez: "y Vd. muy funcionaria española". Diálogo muy de teatro de Beckett.
Salida y vuelta a casa para ver si tienes algún amigo, que tiene algún amigo, que puede hacer que el documento se emita.
Eso sí, he pasado una mañana de lo más activa. Sin conseguir nada, como una performance en cualquier museo.

"Para mí la democracia es un abuso de la estadística. Y además no creo que tenga ningún valor. ¿Usted cree que para resolver un problema matemático o estético hay que consultar a la mayoría de la gente? Yo diría que no; entonces ¿por qué suponer que la mayoría de la gente entiende de política? La verdad es que no entienden, y se dejan embaucar por una secta de sinvergüenzas, que por lo general son los políticos nacionales. Estos señores que van desparramando su retrato, haciendo promesas, a veces amenazas, sobornando, en suma. Para mí ser político es uno de los oficios más tristes del ser humano."

(Jorge Luis Borges)
(Foto Simon Nunn)

1 comentario:

Pilar Mandl dijo...

Ja, Ja, Ja... te entiendo perfectamente, hace poco para conseguir un papel me enviaron a 5 (sí, 5) sitios diferentes para enviarme de nuevo al primero que ya había cerrado... con lo cual lo dejé para dentro de unos meses que ya me habré repuesto del desgaste "psicológico"... si yo te contara! :-)