El artista chino-canadiense Terence Koh (Beijing, China, 1980), crea un cosmos propio gobernado por la decadencia y el exceso deliberado, que ofrece al espectador momentos de frágil belleza, y así puso en marcha su propia boda.Su obra, en la que se aprecia una marcada referencia queer, se posiciona de forma abstracta en límites o polos donde en algunos momentos no es fácil discernir si el artista habla de pasado o de futuro, de sexo o de género, de misticismo o hedonismo, en una producción marcada por el secretismo y el misterio, la mascarada e incluso la numerología.
Koh está presente en todo momento con su identidad poliédrica, asiáticocanadiense- católico-budista-gay-futurista-ancestral, joven o madura… En definitiva, una amalgama de mezclas de las que obtiene todas las referencias posibles para hablar de la decadencia y fragilidad del ser humano, de sus miedos y de sus victorias, de la alegría y del dolor simultáneamente. Love for eternity , -obra que dió título a una instalación en un museo español-, supone una puerta de entrada a un universo personal repleto de muchos y variados referentes a diversas culturas como las del propio Koh. ( Decía una nota de prensa sobre el artista, uno de los mas aclamados por los curators bling)
Ayer se casó en Nueva York en una boda-performance que hará las delicias de los suyos.
(fotos Katy Greyson)
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