miércoles, 13 de marzo de 2013

voy con la verdad por delante



No sé vosotros, pero cada vez que oigo a alguien decir "yo voy siempre con la verdad por delante", me pongo a temblar. En primer lugar, porque no me lo creo; seguro que mienten más que hablan.
Y en segundo lugar porque esa declaración de principios conduce a una barra libre para la falta de educación. El "es que soy sincero" justifica un montón de gestos groseros e innecesarios. No es lo mismo ser crítico que sincero.

Este mesianismo de la sinceridad es un rasgo frecuente en los dirigentes, en Belen Esteban y en los concursantes de gran hermano. Como también lo es la continua referencia a la envidia. El tópico dice que la envidia es el deporte nacional. No estoy de acuerdo. Mucho más peligrosa que la envidia me parece la creencia de que uno es envidiado. No sé si tiene nombre (como lo tiene la gula, la ira o la hipocresía) pero habría que ponérselo. Es un cruce entre egolatría y manía persecutoria, además de prepotencia. Se cren envidiados los envidiosos.

Tampoco respecto de la verdad es nuestro país pionero; nunca por delante. Si acaso y eso si que es empíricamente demostrable; es enunciada siempre por detrás.
España país de pícaros mentirosos es ahora el paradigma de los que van con la mentira por delante y la dicen tan rotundamente, que los únicos que se la creen son ellos. Nunca tantos dijeron que era falso, lo que todos sabemos verdadero y por detrás. E incluso por delante.

9 comentarios:

Daniel F. dijo...

Que se lo digan a Rajoy y su programa electoral...

marcela dijo...

Temujin, efectivamente a cosas como esas me refería.
Un abrazo

India dijo...

En política y a pie de calle, que ya demuestran y se demuestra que no es lo mismo...
A veces, antes de ser dolorosamente sincera, conviene decir un "adios"... porque esos enfermos de sí mismos que se sienten envidiados y recrean el papel de la incredulidad de su situación y practican una falsa humildad, no los cura ni toda la planta de "sofases" del Ikea... y creo también, creo sin saber, que es peligroso... y aterra pensar en autocrítica, si alguna vez una misma presenta sintomatología, ... ufff... voy a buscar chistes que leer, y musiquita que escuchar, me llegaron recuerdos de sabor amargo.
Achuchones!

Daniel F. dijo...

Ahora van a tener que cambiar la ley de desahucios porque contraviene la normativa europea, han sido necesarios 300.000 desastres y más de 1.000 muertes para que se den cuenta.

¡¡¡señor llévame pronto!!!

Blue dijo...

No le des más vueltas, Marcela, esos que dicen que van con la verdad por delante suelen ser unos chulos.
He sido sincera, jajaja.
Besos.

marcela dijo...

India, no te preocupes, una cosa que nunca haremos es hablar de verdades. Si lo que nos rodea es todo falso, mejor dedicarnos con mucho empeño a desmontar grandes "verdades" e incluso medias.
Un beso

marcela dijo...

Temujin, yo creo que se reunen tanto y no tienen tiempo ni de mirar los papeles. Se saludan, sonríen, hacen declaraciones, comen -con la visa institucional-, y quizás una siestecilla, en casa de su amiga de Bruselas.
Lo he visto esta mañan y lo he puesto en facebook, que una tiene varias redes, porque no tiene mucho más que hacer.
Un beso.

marcela dijo...

Blue, sigue siendo sincera,!! para lo que te va a servir!!!
Mira saldremos de esta cuéndo dimitamos nosotros de ellos.
Un beso.

Persona dijo...

El virtuoso no tiene necesidad de hablar de sus virtudes. Un saludo.