y sin embargo, se mueven....

La comisión creada por Obama en 2009 para investigar el origen de la crisis financiera en su informe ha llegado a la conclusión de que las causas fueron tres, y como no podía ser de otra manera el veredicto es el que todos los listillos sabíamos con antelación: La mayor crisis financiera desde la Segunda Guerra Mundial es el resultado de la avaricia, la incompetencia y la ignorancia. 

El informe consta de 600 páginas lo que me parece un despilfarro de papel.La crisis tuvo lugar porque fallaron las regulaciones a las entidades financieras. El otro día, hablaba aquí de lo importante que es hacerse el importante para tener poder, en economía es igual: cuanto más grande la limusina, más inmenso el ignorante que va dentro. Los riesgos tomados por los irresponsables y geniecillos de Wall Street, dieron al traste con una economía que se sostenía con productos que nadie entendía.

Muchos generales monetarios y los guardianes del sistema, ignoraron todas las advertencias. y como suele suceder por las alturas se olvidaron de cuestionar, entender y gestionar crecientes riesgos prque en definitiva el dinero era de otros. No es que cometieran tropiezos según el informe, sino errores garrafales”.

El caso es que han pasado casi tres años y lo cierto es que no se dará paso a ningún cambio real. De nada ha servido revisar más de cuatro millones de correos electrónicos, entrevistar a más de 700 funcionarios de Wall Street, realizar 19 audiencias públicas y entregar centenares de documentos. Como dijo el senador Christopher Dodd: Wall Street puede más que Al Qaeda. Y es la verdad.

El informe señala que gran parte de la culpa de la mayor crisis financiera de los últimos 80 años recae en Alan Greenspan, Ben Bernanke, Timothy Geithner y Lawrence Summers; también son responsables la SEC, las agencias de calificación y los grandes bancos. Todos ellos sabían los mejores restaurantes mundiales, la cocina tecnoemocional, los teléfonos de las chicas que acompañan en los viajes de negocios, pero fueron incapaces de detectar la cantidad de alarmas y bombas esparcidas por Wall Street, como tampoco supieron ver la rápida propagación de la burbuja inmobiliaria en Europa.

De momento los que caen son los de los países árabes, porque los mismos anteriores ahora están montando la burbuja de las materias primas, pero si se mira el mapa geopolítico occidental se verá que están todos los que la cagaron (con perdón)

Todos siguen hablanco y reconvirtiendo, las agencias de calificación tampoco se arrepienten y siguen patrocinadas y aceptando sobornos de los grandes bancos. A su vez, los grandes bancos siguen especulando salvajemente y apelando a las ganancias de las operaciones en microsegundos que les permiten seguir depredando a la economía real. Atónitos asistimos a la reconversión ideológica de nuestro líder en plan neoconverso, pero en los bancos vemos que siguen hablando de beneficios y de que se necesitan más regulaciones para el mercado de trabajo, más años para jubilarse, y más campos de golf para holgar y  desestresarse ellos, no sus bancos.

Los bancos han practicado algunas operaciones fraudulentas, han invertido dinero de sus clientes en riesgos que  ni siquiera conocían. Han falsificado balances, han adulterado documentos. Las auditorías están pagadas por las empresas que las solicitan, así que los resultados y mermas se hacen a la carta del demandante.

La contabilidad creativa está en manos de los peores artistas.

Y a esas críticas los bancos argumentan que esos son simplemente “vicios de procedimiento” que no afectan la calidad del sistema. Pero la realidad dice otra cosa.Y son formas, con muchos vicios.

Para que sucedan grandes fraudes, es necesario que exista crecimiento económico. Cuando la economía crece genera confianza e introduce la idea de solvencia hasta en los pocos solventes. Esto lleva al segundo paso: conceder préstamos a los nuevos solventes, pues su solvencia les permitirá solventar los altos intereses del sistema. Así se ha organizado una de las mayores crisis económicas de siglos. Todo por la pasta.

La expansión de la burbuja,que ahora se está gestando; la de la deuda, responde al mismo fenómeno de la célebre pirámide de Ponzi, los que se endeudan pagan los intereses, y siguen endeudándose. Así cada día la deuda es mayor y los intereses también. Simplemente cuando la cadena se rompe por falta de confianza, o por que se cruza un perro delante del coche del Sr. Trichet, la pirámide que está sustentada en sus base por cientos de esclavos se viene abajo incluso con el mayordomo del emperador. El emperador no estaba, se encontraba dando pelotitas en el campo de golf. Con un pírrico par...doce.

Y un modelo a seguir, por lo menos nos divertiríamos:

En Islandia para las elecciones municipales de 2010 un grupo de artistas formó un partido político. Con sólo seis meses de anticipación, músicos, escritores, dramaturgos, actores y gente del medio de la cultura conformaron el partido "The Best Party" (El Mejor Partido) en vistas a presentarse por la alcaldía de Reykjavík. La Capital de Islandia con un 60% de la población es un puesto clave, es la antesala para la liga mayor y para el puesto de primer ministro.

El Best Party desarrolló un programa de gobierno creativo arraigado en estrategias del arte, que van desde el dadaísmo hasta la internacional situacionista; sus promesas electorales eran: Eliminar la droga dentro del parlamento para el 2020 - Subvenciones sociales para los perdedores - Toallas gratis en las piscinas públicas; prometían que Reykjavík volvería a tener toda su "onda" y agregaban... "podemos prometer más, ya que de todos modos no lo vamos a cumplir".