Hace unos meses perdí el DNI, así que fui al lugar que me dijeron lo hacían ( muy escondido, por cierto) tan escondido que el taxista no me quería llevar. Le dí la dirección y me dijo "allí no hay ninguna comisaría" "perdone, he preguntado por teléfono" "yo si quiere le llevo, pero no hay nada"
y efectivamente en la calle no estaba. Descubrí con un GPS que se encontraba a la vuelta de la calle en una especie -no lugar ajardinado- y en el que me dijeron que lo hacen sin cita previa.
Las colas hay que hacerlas de 7 a 9 horas, y con suerte te toca uno de los 130 números que dan.
Bueno, resolví lo del número a la tercera vez que me desplace. Tuve no obstante que esperar 3 horas a que saliese mi número. Había 6 pantallas pequeñas de led, en el que aparecían los números. En ocasiones se apagaban. Pregunté y me contestaron: "es para ahorrar energía". Yo perdí toda la mía. Luego dicen que tenemos que ser más competitivos en el trabajo.
Si se multiplica las horas de hacer colas, por las horas de productividad perdidas, seguro que sale E=m2, la teoría de la relatividad con la que afrontamos la crisis.
Por cierto, si llamas para cita previa te puede tocar el 28 de Agosto, que casi seguro que no estás en Madrid. Así, que las oficinas de cita previa están vacías. Otro ahorro; si no se hace nada, la energía no se desparrama.
Para terminar mi depresión post-vacacional veo al risistas en una entrevista en CBSC con María Bartiromo vendiendo nuestro país y diciendo que somo un país para invertir en : banca, renovable, biotecnología, y simpatía. Que somos super solventes. Y mira tú por donde, que lo que más me gustaría es que él fuera renovable.
1) Banca. No le falta razón, nuestros bancos que compran nuestra deuda se están forrando. Compran los papelillos al 4,3% y los llevan al Banco Central Europeo, allí dejan los papelillos y les dan dinero contante y sonante al 1%. Beneficio total 3,5% sin despeinarse. Más tarde Botín con lo que gana se va comprando más bancos por el mundo. Los países y gestores internacionales- llamados ahora por el líder "inversores" compran deuda porque el angelito dice "nuestra deuda es muy rentable". Tiene razón.
Me tomo el primer tranquimazín. Nuestra deuda es de 3 billones de euros. Tal cual.
2) El hombre que susurraba a las renovables, ha logrado en seis años de gobierno y gracias a su sueño "vamos a cambiar el panorama eléctrico, lo vamos a revolucionar" que la tarifa de la luz haya subido un 30%, -eso la doméstica- que la industrial es mucho más cara. Así que las empresas se deslocalizan. Una de la industrias españolas que mejor iba montando molinillos y que llegó a cotizar en bolsa a cerca de 50 euros por acción está a 5,40. Negocios que se van a pique y él se compara con los grandes países. Terminará dando luz con sus iluminadas ideas.
3) Biotecnología. El chupa-chups parece que va a llevar bífidus activos y la fregona un led para conectar con la señora de la casa y que envíe sus órdenes.
Me tomo el segundo tranquimazín y desconecto.
Por cierto, Belén Esteban parece que tiene unas perspectivas de voto superiores a las de IU. !!! país...!!!!!
Terminará presentándose. Y que quieren entre ella y DelaVogue me da exactamente igual. Hablan igual y dicen lo mismo.
Lo mantengo y puedo demostrarlo.
Nunca se llega más lejos que cuando no se sabe a dónde se va.
Nunca se llega más lejos que cuando no se sabe a dónde se va.
(Foto Paola Pivi)
3 comentarios:
Como tienes la razón, hay que dártela.
Los tranquimazines un poco más separados...
En la reunión que tuvo el otro día con economistas parece ser que uno de ellos dijo a un periodista al terminar: "Rezad por España". Creo que eso ya lo habías dicho tú ;)
Besos.
Es que vivimos en un pais de tuercebotas y botarates de tres al cuarto donde no pegar un palo al agua es lo habitual, no hay mas que fijarse en el absentismo laboral, respecto a lo de la Esteban tengo en mente un post para toda esa corte de conchabeos, gente de mu mala calaña, de programas estupidos de corazon, que no hacen si no comernos las pocas neuronas que nos quedan, tiempo habra para ello...
Saludos a todos.
Ay!
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